Mamen siempre quiso ser bailarina profesional, pero los años se le han caído encima y ve cómo bailarinas más jóvenes están cumpliendo sus sueños. Trabaja en un club de un polígono industrial para poder mantener a su hijo, malvive en un barrio de la periferia de Málaga y tiene una relación mala con su jefe. Una noche, en la puerta de su casa, aparece en el suelo un hombre borracho e inconsciente, que resulta ser su padre con el que lleva sin hablarse desde que murió su madre y él desapareció de su vida. Poco a poco, y no sin muchos obstáculos por el camino, Mamen y su padre comienzan a pensar que pueden arreglar aquellos que se rompió hace tiempo, ya no habrá miedo a perdonar.